6.8.09

Lo que daría yo por encontrarte a la vuelta de una esquina

En qué oscuridad te enredas
lejos de mi espalda
sumergido al fondo de la ceguera
por la falta de costumbre.
En qué abrazo de sábanas frías
me dejas con el silencio en los labios
los ojos abiertos y vacíos.
Sin más silueta que la tuya
en mi memoria.
Sin más sonido que tu voz.
Sin más deseo que tus caricias.
Hecha un nudo de mi misma.
Toda piel
toda sangre
toda luz.

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